Joan Margarit
Hay playas en las hojas de este libro donde empezar el mismo amor y, aún, sonreír desde los versos. Siempre estarás conmigo si puedo escribir. Tú serás yo y te amaré en la penumbra, porque la corrosiva luz del día reduciría a polvo estas olas del mar que miro con tus ojos. Sólo así nos protegen las palabras del infierno de su significado, y nos adentramos en la edad roja, siempre con el horizonte de la isla del tesoro en nuestra frente.